martes, 7 de junio de 2011

Cronica de sables

MARATÓN DES SABLES 2011
26º EDICIÓN

Descripción de Carrera:
250 KM por el desierto del Sahara marroquí en 6 etapas y 7 días, 33, 38, 38, 82,42 y 18 kms, en régimen de autosuficiencia.
Cronica:
Antes de empezar a escribir la crónica de esta carrera quiero empezar con unas palabras de agradecimiento a todo el equipo de Wild Wolf, patrocinador 100% de este proyecto, que se han portado estupendamente conmigo, a los dos entrenadores que en solo dos meses han sido capaces de ponerme a punto para estar hay delante en esta prueba tan difícil de preparar, a David Ruiz, mi compañero de fatiga que al final por motivos laborales no ha podido acompañarme en este reto, a mi Fisioterapeuta Jordi Reig y a mi masajista Paquito Rivera, que entre los dos me han mantenido sin ninguna lesión, a todos los compañeros de entrenamiento que me han echado una mano y han hecho más llevaderos los entrenos, a mi familia que los he tenido apoyándome desde que me puse mis primeras zapatillas, y en especial a mi mujer Mariana y mi Hijo Vicente, que los he llevado conmigo en toda la carrera con una foto, muchas gracias a todos de corazón.
Día 1/04/2011, a las 4:00 h de la mañana, empieza mi aventura en el maratón des sables, levantándome en Villena, en casa de mis padres, donde después de  desayunar me llevan al aeropuerto de Alicante, donde mi vuelo destino a Madrid sale a las 7h de la mañana, mi padre, Manuel (compañero de mi anterior aventura en el desierto) y mi mujer, bueno realmente mi aventura en sables empieza desde que nos confirman en el mes de febrero, que tenemos dos plazas para ir, que mi mente ya no deja de pensar en otra cosa que en cómo gestionar lo mejor posible esta carrera en autosuficiencia. Ya en el aeropuerto, facturo la maleta en la terminal nueva de Alicante, y nos sentamos a tomar algo mientras se acerca la hora de embarque, los últimos ánimos por parte de las personas que me acompañan, Manuel confiando en mi una vez más, el me conoce bien después de muchos años corriendo juntos, y eso me anima, le agradezco muchísimo el madrugón que se pegó para acompañarme al aeropuerto, me sirvió de mucho, y llega el momento de pasar el control para embarcar, momentos difíciles, mi mujer llorando y los tres dándome suerte, yo como puedo manteniendo la compostura, en eso que me viene a la cabeza que la navaja, material obligatorio para la carrera, que  no la he facturado con la maleta, primer sobresalto, me la quitarán?? Al final no me dicen nada y paso el control sin problemas, respiro profundamente de alivio, de los nervios me dejaba el pasaporte en la bandeja, ya me veía yo en Madrid intentando comprar una navaja ligera para la carrera, bueno pasado el control a la puerta de embarque y a esperar la hora de volar. Una vez montado en el avión tengo una cosa en el pecho que es difícil de explicar, mi pequeño en mi mente y mirando por la ventanilla me es difícil no llorar…… viendo amanecer en una hora de vuelo en Madrid, recojo la maleta y me dirijo a la T-4, donde ha quedado toda la expedición española que completa el vuelo fletado por No-Limit a las 11h de la mañana, frente a los mostradores de facturación 908-909, todavía tengo tiempo y me siento en un banco a comerme un bocadillo acordándome de los momentos anteriores en Alicante y con un poco de melancolía, el pensar que voy a estar diez días sin ver a mi pequeño se me pone un nudo en la garganta y me es difícil aguantar las lágrimas en los ojos, pero intento pensar en la aventura que se avecina y me digo para dentro tienes que disfrutarla al máximo por ellos. Hablo por última vez con David Ruiz y con Chomi por teléfono ( compañeros en Wild Wolf ), que me dan muchos ánimos y también confían en que lo voy a  hacer bien, en poco tiempo ya se empieza a ver movimiento de gente con las mochilas de batalla y se empieza a ver ambiente de todo el personal que volamos en el mismo avión, esto ya huele a sables, empiezan las presentaciones, el conocer todos los compañeros que vamos a tener estos diez días, la cosa pinta bien, se ve gente con experiencia algunos de ellos, gente que vamos por primera vez y todo son comentarios de que peso llevas en la mochila, que zapatillas vas  a utilizar, en fin todo el mundo valorando sus decisiones junto con la de los demás, que sensaciones!! Empezamos a facturar equipajes y de nuevo a pasar  por el control, esta vez si, sin navaja, jaja, enseguida se empezaron a formar los componentes de cada jahima que iban a ser tus compañeros durante todo el campamento, tuve una suerte grandísima, esta aventura la han hecho más especial si cabe los compañeros que he tenido en nuestra particular habitación en el desierto, la jahima nº 38, con Luis, Jose Miguel, Miguel, Sergio, Cesar y Carlos, en definitiva un grupo que enseguida congeniamos y a echo de esta carrera toda una vivencia. Muchas gracias a todos ellos por el compañerismo ofrecido en todo momento, por los ánimos en los momentos más difíciles y por hacer de estos días momentos inolvidables para siempre. Sale el avión dirección a Er-Rachidia , a las 15h. nos esperan dos horas de vuelo, al aterrizar tenemos dos horas menos pues llegamos a la misma hora que hemos salido desde Madrid, al bajar del avión nos sorprende la diferencia de temperatura como era de esperar, aunque los que han estado otros años comentan que no hace demasiado calor con lo que puede venir, y efectivamente tuvimos días de muchísimo más calor con picos de 51 º. De nuevo más controles, esta vez ya en suelo Marroquí, revisión de pasaportes y cuñado con la fecha de entrada, después tres horas de autobús hasta el campamento de donde saldría la primera etapa, en el autobús la primera botella de agua, la bolsa de picnic y el Road-Book, con la descripción de cada etapa, kilometraje, etc, y todo el mundo estudiándolo con mucha curiosidad por conocer a lo que nos enfrentábamos, antes de llegar una parada para observar un precioso paraje ( un cañón espectacular lleno de palmeras y casas ), una vez en las cercanías del campamento nos dejan los autobuses y tenemos que montar en camiones militares que son los que recorrerían los últimos kilómetros hasta el campamento por no poder llegar los autobuses, toda una experiencia, todos hay al montón con maletas, mochilas, ya saboreando lo que iba a ser estos días llenos de arena, polvo y tierra, se veía a lo lejos un campamento grande, con tiendas blancas un poco más grandes y jahimas negras que se preveían iban a ser las nuestras, apartadas del resto, para no tener contacto con nadie de la organización, estrictos son un rato esta organización, formando un circulo muy grande donde íbamos a alojarnos los casi 1000 corredores, cada uno en la jahima numerada correspondiente, de ocho plazas, una vez bajamos de los camiones todos nos dirigimos a buscar donde estaba ubicada la nuestra, la nº 38, que siempre iba a estar en el mismo lugar del circulo, el campamento se montaba meticulosamente igual cada día en la zona de meta, puesto que cuando entrabas a meta tu sabias donde te encontrabas, bueno los primeros días costaba un poco pero al tercer día ya estaba controlado, tenias la sensación de estar en una mini ciudad que se desmonta cada día y se vuelve a montar en otro lugar, la verdad es que la infraestructura que lleva esta carrera sorprende a cualquiera, para mover semejante montaje cada día de un lado para otro, tiene que estar todo coordinado porque si no es un caos, una vez instalados en nuestra habitación, empezamos a familiarizarnos con el resto del campamento, nos explican que este año, se ha impuesto un nuevo sistema para ir al aseo, nos dan a cada uno un paquete de bolsas de basura de color marrón, y nos explican que es material obligatorio llevar en todas las etapas, que es obligatorio utilizarla para hacer tus necesidades en unos baños de lona montados alrededor del campamento sin techo, con publicidad de la carrera, pues podías mirar el cielo mientras las hacías , después hacerle un nudo a la bolsa y depositarla en un cubo de basura ( un buen sistema para no dejar rastro por donde pasa el campamento ), siendo penalizado el que no los utilizase, bueno  hay que llevar un cuidado exquisito para no ser penalizado por cualquier cosa, a la mínima te anotan el dorsal y te cae una hora por menos de nada, y si hay dudas al nº de jahima entera. La primera noche tenemos cena por parte de la organización, refresco con algo de pasta, huevo frito, pan, postre, té, café, muy bueno todo y a dormir la primera noche en el suelo, es hora de probar cada uno con lo que se ha llevado, ropa, saco, esterilla ( no todos ), yo si me llevé la mitad, de la cadera hasta los hombros, la corté para reducir peso y me fue bien, estuve a punto de no llevar pero el descansar es fundamental en este tipo de carreras, lo que no me fue muy bien fue el saco que pequé de muy ligero y pasé algo de frio, las temperaturas en el desierto bajan mucho con respecto al día.
Día 2/04/2011, Primer amanecer, precioso, sacabas la cabeza del saco y veías como rompía el día sobre las cinco de la mañana, que bonito, una sensación especial, mirabas a tu lado y veías a tus compañeros de jahima dentro del saco, que sensaciones, la primera noche no duermes demasiado, pensando, aclimatándote a tu nueva cama que va a ser durante nueve noches seguidas, en definitiva la jahima es una lona negra de techo, con unos palos, unas piquetas y en el suelo una alfombra roja, menuda suit, eso si con vistas espectaculares, tanto por delante como por detrás, por un lado veías la puesta de sol y por el otro el amanecer, de ensueño, nada más levantarnos, después del desayuno, también por la organización, teníamos el control de material, entrega del reconocimiento médico, electrocardiograma, donde te entregaban la bengala, la bosa de pastillas de sal, la tarjeta médica  y la tarjeta de recogida de agua, la cual te iban a marcar cada vez que te entregaban tu agua pertinente, bajo penalización si no la recogías a la hora que marcaban, que era de 7h30´ a 8h de la mañana en el centro del circulo de jahimas, una vez pasado el este control entregabas tu maleta y desde ese momento ya no tienes nada más que lo que vas a llevar en tu mochila, como yo tenía el dorsal 44, entraba en el primer grupo que iba de doscientos en doscientos y no veas que comienzo de día, ya corriendo para que no se me quedase nada en la maleta, luego una vez pasado el control, ya a descansar y a esperar la hora de la comida. La comida cuscús, pan, ensalada, refresco, yogur, té, café, se podía repetir lo que quisieras, hambre de momento no pasábamos, nos poníamos todos hasta arriba pensando en lo que nos venía, por la tarde charla de normas y funcionamiento de carrera, explicaciones de los recorridos, enfrente de nuestra jahima, estaba la de un equipo de Marroquís, donde se encontraba Ahansal, dos veces ganador de Maratón de Sables consecutivas, que los íbamos a tener de vecinos durante toda la carrera,  esa tarde era un ir y venir de cámaras de los medios de comunicación, fotografiándolo, entrevistándolo, haciéndole un montón de preguntas de cómo se veía de cara a esta edición, sobre el material que llevaba, etc, era todo un espectáculo ver la atención que despertaba, y nosotros hay tumbados en nuestra jahima observando todo.  Un poco más tarde la ultima cena por la organización, con un globo blanco iluminado en su interior, retrasmitiendo imágenes de carrera de la edición anterior, con un grupo de saharauis tocando y cantando armonizando la cena y dándole ambiente, a partir de aquí ya corría por nuestra cuenta la alimentación, la mayoría tomamos un poquito de vino tinto, para así, ver si dormíamos un poquito más, difícil, porque el pensar que al amanecer arrancaba la primera etapa, te recorría una cosilla  por el ombligo que no veas, nos fuimos pronto a descansar, nos metimos en el saco y cada uno pensando en el silencio de la noche en sus cosas, imaginando como se daría el primer día, difícil planteamiento, máximo peso, la aclimatación, la hidratación, el ritmo, no quería que fallase nada, creo que el primer día es uno de los más complicados, el no cebarte con el ritmo de los demás, todo el mundo sale eufórico, momentos para pensar en tu gente antes de dormir……….
Día 3/04/2011, 1º Etapa. las seis de la mañana, silencio absoluto, y de repente, se oye a lo lejos, un canto que nos iba a ser familiar durante el resto de los despertares, yalayalayalayalayala, cantaban los saharauis, mientras te desmontaban la jahima por encima de las cabezas y te dejaban viendo el cielo sin más, y así desmontaban las 120 jahimas en un instante, y era impresionante lo que cambiaba el campamento en un momento, de verse un circulo de color negro estático, a , de golpe verse un circulo de colorido en movimiento, todo el mundo sin techo, preparándose el desayuno, colocando las cosas en la mochila, calzándose las zapatillas, recogiendo la botella de agua correspondiente en el centro del circulo, llenando los bidones de agua y sales, era una sensación inexplicable, mirabas a tu alrededor y se notaba la tensión en cada uno de los rostros que veías, estaba a punto de arrancar Maratón de Sables 2011, 33 km por delante, 13 de los cuales cruzaban las montañas de Dunas de Chebbí, las  más grandes y famosas de la zona. Llega el momento, se produce la llamada de todos los atletas hacia la zona de salida, para formar el gran número de la 26º edición entre todos, mientras nos graba el helicóptero desde el aire, ya se siente que esto no tiene freno, todo el mundo con ganas de que las piernas se pongan a correr como nunca, queremos devorar kilómetros, una vez terminado el protocolo del número se forma la salida algunos deseosos de poder estar en la primera fila para poder ser vistos por sus familias por la Web de la organización, la salida como todas la ediciones con dos grandes teteras hinchables a los lados, típico de sables ,empieza Patrik Bauer ( director de carrera ) a dar las indicciones de carrera en francés, en lo alto de la baca de un 4 x 4 , con un micrófono, junto con la traductora en inglés, felicita a todo aquel que ese día cumple años y se le canta cumpleaños feliz, imaginaos más de mil personas cantándote cumpleaños feliz en medio del desierto en inglés antes de salir, es como para que no te pare ni la macarena, todo esto con el helicóptero sobrevolando por encima de nosotros grabando cada momento, la línea de salida plagada de cámaras de video y fotografía, se pasa a la música que cada día se va a escuchar antes de la salida con la cual se te mueven las piernas solas a bailar y justo antes de dar la salida suena una canción mítica de ACDC ( Highway to Hell ), con la que todo el mundo mete la primera velocidad, aprieta los dientes y arranca la primera etapa. Todo el mundo sale de estampida motivado por todo lo que se mueve a tu alrededor, ya nadie piensa en lo que pesa la mochila, tu solo pensando en encontrar pronto tu ritmo e ir soltando nervios y tensión por el camino, impresionado de cómo el helicóptero nos pasa casi tocándonos la cabeza lateralmente grabando la gran masa de corredores, ahora solo queda disfrutar, disfrutar y disfrutar, dejar salir todo el trabajo realizado y de que tu mente empiece a trabajar para que no falle nada, las piernas van  cogiendo temperatura, todo va engranando poco a poco, ya estás en carrera, cuánto tiempo deseando ese momento tan esperado, intentando no fijarte en la gente que se va hacia adelante solo buscando tus sensaciones, dejar que pasen kilómetros que queda mucho recorrido, la larga distancia no es como empieza sino como termina, la primera vez que me miro el reloj llevo casi una hora corriendo, increíble se me ha pasado volando, pisando terreno de arena y pronto visualizo el primer control km 13, donde nos dan una botella de agua y te clican la tarjeta, momentos importantes para mecanizar todo lo que vas a hacer en cada control perdiendo el menos tiempo posible y sin ser penalizado,  control que nos da paso a las montañas de dunas, de lejos parecían grandes estas montañas pero cuando estás justo debajo te parecen enormes, hay que centrarse en la técnica de correr por ellas, y la forma de trazarlas, es muy importante para no derrochar energía extra, leer bien el terreno para elegir la trazada buena de arena dura y hundirte lo menos posible, el helicóptero no deja de hacer pasadas por encima de nosotros cogiendo imágenes increíbles, miras al horizonte y no ves otra cosa que dunas más dunas y más dunas, parece que nunca vas a salir de allí, después de estar corriendo una hora desde el primer control, sigues dentro de las dunas, pero eso sí,  maravillado por su belleza, parece irreal encontrarte a niños pequeños jugando en medio de esa inmensidad de arena, justo al salir de estas montañas de dunas se ve a lo lejos el segundo control km 26, donde te dan otra botella de agua, y cogemos una llanura de pedregal, donde poder aumentar el ritmo y encarar el último tercio de la etapa, se visualiza los corredores que llevas delante de ti que antes en las dunas no los veias y te planteas ganar algún puesto, se hace muy largo porque aun sabiendo que tiene que quedar poco no se ve la meta y cuando se empieza a ver todavía quedan unos cinco kilómetros, aquí las distancias engañan muchísimo, a pocos metros de entrar en meta noto en mis piernas el amago de calambres, y con mucho miedo finalizo mi primera etapa con un tiempo de 3h 30` en 33 km, te dan un té nada más entrar y a recoger tu tres botellas de agua que tienes que racionar hasta mañana por la mañana, en esta etapa solo tomé las sales que yo me llevé, y no fueron suficientes, perdí muchas más que las que tomaba, a partir de aquí decidí empezar a tomar meticulosamente las pastillas de sal que la organización te facilitaba. Ahora tocaba descansar y recuperar para el día siguiente estar lo mejor posible, hacer una valoración de cómo había ido y no cometer los mismos errores, sorprendido de lo bien posicionado que había entrado, 17 de la general y primer español, increíble, mucho mejor que mis expectativas al comenzar, una vez en la jahima a esperar que entrasen todos los compañeros que iban viniendo poco a poco, y empezaba el comentar las sensaciones de cada uno, antes de terminar el día, al salir las clasificaciones, un sobresalto, me viene un compañero y me dice que no salgo en la clasificación, voy a la organización y enseguida lo solucionan, se ve que me falló el chip al entrar en meta, pero con las comprobaciones de las cámaras que graban en tiempo real se solucionó sin problemas, buff, yo pensaba ya tengo la primera penalización!!!
Esa tarde fue increíble, porque al ser primer español de la primera etapa, vinieron a nuestra jahima a hacerme una entrevista y una foto, todo el mundo hay pendiente,  pude aprovechar para resaltar que Wild Wolf  era el motivo de mi participación en sables y la foto de mi mujer y mi hijo en la parte delantera de mi mochila, la energía para completar esta aventura, me sentí esa noche satisfecho con el trabajo, y me dio fuerzas para seguir así, después cuando cayó la noche llegaron los primeros mensajes de apoyo, cada uno con su frontal, metido en el saco , leyendo los suyos, eso fue una de las sensaciones más fuertes del día, te sentías especialmente sensible, y sin darte cuenta estabas llorando como un nene pequeño, que momentos más gratificantes, ahora sí que ya no me dolía nada, mañana voy a volar, que cosa tan maravillosa para irte a dormir.
Día 4/04/2011, 2º Etapa. Después de otra noche bastante fría, y una vez más a las 6h de la mañana puntuales, sin jahima, empezamos el ritual de  todos los días, abrigados con todo lo que decidimos llevar preparamos el desayuno, y a prepararse una vez más la mochila para la nueva etapa, recoger tu botella de agua, rellenar los bidones de carrera, tarea difícil después de una noche fría y con un viento increíble que nos desmontaba continuamente la jahima, esa noche los saharauis encargados del campamento tuvieron mucho trabajo levantando las jahimas que el viento tiraba, clavando las piquetas que saltaban, hubo mucha gente que pasó toda la noche con la jahima encima a modo de manta, todo el mundo con una capa de arena encima del saco, a las 8h30´ a la línea de salida. Las sensaciones regulares después de no descansar demasiado por estas condiciones, mucha incertidumbre de cómo irán las piernas día tras día, de cómo se presentaba el día con poca visibilidad por la tormenta de arena, pero una vez arrancas la cabeza solo piensa en hacerlo bien. 38 km por delante, terreno al inicio de piedras pero enseguida empezamos a pisar de nuevo dunas, el ritmo ya dominado empieza afianzarse, se empieza a controlar los dorsales que tienes más o menos que controlar y desde aquí a pensar en estrategias, conforme pasan los kilómetros empiezo a disfrutar porque veo que aguanto con los de delante relativamente cómodo, eso me tranquiliza y me permite ir pensando en que no me falle nada, las pastillas de sal, las sales para el bidón en los controles, la comida meticulosamente cada hora, todo sobre ruedas, lo increíble era que estuviésemos corriendo por ese terreno con la impresionante ventisca, todos tapados hasta los ojos, la arena picaba en las piernas que daba gusto, la concentración era máxima para no salirte de la ruta y no perderte ya que las señalizaciones las veías cuando estaban encima, pero al final de nuevo en meta y otra etapa difícil en el bolsillo, en el puesto nº 15 y un tiempo de 3h 38´, manteniéndome 1º Español.
Día 5/04/2011. 3º Etapa, Esta noche todavía perduraba la tormenta de arena , pero se notaba que iba bajando en intensidad, todo hacía presagiar que a la mañana siguiente podía haber pasado, y así fue al despertar teníamos un sol radiante, la tormenta se había ido, la noche la pasamos mejor que la anterior ya que le cogimos el truco a la jahima de bajarla por el lado que soplaba el viento y eso nos permitía refugiarnos un poco más, por delante otros 38 km, una vez más a la línea de salida y esta vez, a las 9h de la mañana el calor ya se dejaba notar, había que centrarse de nuevo en la hidratación que no fallase nada, esta etapa según el road-book  nos marcaba una buena kilometrada de dunas en la parte final, lo que todos pensábamos en el día de mañana de la etapa reina, que había que reservar un poco de fuerzas para lo que se nos venía encima, me encontré muy bien y me permitió seguir con la estrategia hasta ahora entrando en el puesto 14 con un tiempo de 3h 57´ junto a Marco Olmo, 2 veces ganador del MonBlanc, todo un especialista de la larga distancia a sus 63 años. Al llegar al campamento todavía sin montar todas las jahimas, nos sentamos juntos en una de ellas a comer algo y charramos un rato sobre la etapa, mientras yo me tomaba mi recuperador de chocolate el se comía un trozo de queso parmesano poniéndome los dientes largos, después decidí ir a visitar el equipo médico para curar las ampollas de los pies y de paso que me pegasen un vistazo a mi garganta que llevaba bastante irritada, me confirmaron lo que me temía, una buena subida de anginas, seguramente debido al frio pasado estas noches atrás, por suerte no tenía fiebre pero me dieron antibióticos por el riesgo de que me subiese y con esas temperaturas era motivo casi seguro de retirarme, con el miedo en el cuerpo me fui a descansar, esa noche me tomé el antibiótico, aunque sorprendente descansé bastante bien, a pesar de la tos continua que tenia, me despertaba a menudo y me levantaba a sonarme apartado de la jahima para molestar lo menos posible a los compañeros que dormían, aprovechaba para hacer un pis,  beber un poco de agua que me aliviaba la tos, de paso disfrutar del silencio del campamento en plena noche y de ese cielo que parece que no sea el mismo.
Día 6/04/2011.4º Etapa ( Etapa Reina de Maratón de Sables ) 82 km.
El día amaneció radiante, un amanecer increíble, en las caras de todos nosotros se notaba la tensión pensando lo que teníamos por delante, el día más difícil, donde podías perder mucho si no calculabas bien el ritmo, el cansancio de lo ya recorrido, todo el mundo coincidía en que si pasábamos este día ya estaba prácticamente asegurada el terminar sables, y yo sufriendo para mis adentros el miedo de cómo respondería el cuerpo, esta etapa tenia de peculiar que habían dos salidas, a las 9h la salida grande y a las 12h la salida de los 50 mejores clasificados donde me encontraba, 1º objetivo cumplido, se da la salida general y todos aplaudiendo sin descanso a todos los compañeros que arrancaban 3h antes que nosotros, todos los medios de comunicación grabándonos a los que nos quedábamos y el helicóptero sobrevolando la masa de corredores que poco a poco se estira, y unos minutos después una sensación difícil de explicar, nos refugiamos en una jahima grande que han dejado  para esperar estas 3 horas, mirando como se terminaba de desmontar el campamento, como se marcha la caravana de coches de la organización que montara los controles de paso, y se queda un vacio increíble, solo 50 corredores, unos pocos comisarios de carrera para darnos la salida y unos pocos vehículos, cada uno se acomoda intentando relajarse un poco, otros hablan de cómo es el recorrido, otros de el calor que va a hacer a las 12h , en fin mirabas los rostros y era  para haberlo grabado, suspiros, miradas de incertidumbre, poco después nos marcan los dorsales con un color fosforito para diferenciarnos en carrera de el resto, yo aprovecho con el agua que me sobra una vez llenado los bidones, porque nos dieron una botella extra para esas 3 horas, para lavar la camiseta y el pantalón, así quitarle un poco de salitre, y evitar posibles rozaduras, los cuales se me secaron en pocos minutos, llegó la hora, nos vamos acercando a la línea de salida, una línea imaginaria porque la salida ya estaba desmontada y había salido hacia la meta, en seguida notamos que el sol picaba más de la cuenta, Patrik Bauer, nos da la mano y nos desea suerte uno a uno llamándonos por nuestro nombre, colocados uno al lado del otro los 50 corredores, con la cámara de televisión grabando cada detalle, cuando llega a mi altura, me hace un comentario en francés sobre la foto de mi mujer y mi hijo en la parte delantera de la mochila, ooohh bebé bravo, fuerza y suerte, me hace mucha ilusión porque son ellos los que en esta etapa me van a dar las fuerzas en los peores momentos, mirabas alrededor tuyo y pensabas para ti, vas bien Vicente estas entre los mejores, venga, tranquilo que todo va a salir bien, y se da la salida, a los pocos kilómetros empiezo a notar un una sensación en las piernas que nada tiene que ver con las etapas anteriores, y me doy cuenta que el antibiótico no es buena idea, bastante es que el cuerpo está peleando con la infección de garganta como para encima meterle antibiótico al cuerpo, me sentía aplatanado, en este momento tomo la decisión de no volver a tomar y jugármela hasta el final, que sea lo que tenga que ser, intento centrarme en la etapa y no pensar demasiado en esto, sobre las 2h de carrera empezamos a coger corredores que han salido a las 9h, algunos con verdaderos problemas en los pies por la manera de cojear, y piensas para ti, podrán terminar de esa manera, pero si, no se sabe lo sufridor que puede llegar a ser el cuerpo humano cuando se somete a estas pruebas con un punto de espiritualidad, esto hace grande el alma de cualquiera, van pasando kilómetros y el cuerpo poco a poco encontrando su ritmo, pasando controles, me olvido de los dorsales que hasta ahora controlaba, no quiero meter la pata por cebarme, quiero hacer mi carrera y asegurar terminar dadas las circunstancias, si es posible mantenerme en los puestos que voy, me centro en disfrutar de los magníficos paisajes que vamos dejando atrás, en dedicarle un rato de carrera a toda la gente que me ha apoyado, compañeros de entreno, amigos, compañeros de trabajo, a todos y cada uno de mi familia, pero cuando pensaba en mi chiquitín me saltaban las lágrimas solas, 82 kms dan para mucho, era increíble lo sensible que me encontraba,  pero eso me ayudaba muchísimo a no sentir el dolor y a seguir para delante,  así casi sin darme cuenta empezó a caer la tarde, la noche se nos echaba encima,  disfrutando del atardecer paso por el penúltimo control, en el km 61 donde me cuelgan en la parte de atrás de la mochila el tubo fluorescente que la organización obliga a llevar cuando anochece, con la bajada de temperatura importante, decido animar mi ritmo esta parte final ya que me encuentro bien aun siendo más difícil trazar bien de noche, con la luz del frontal encendida, que de vez en cuando me gustaba apagar para disfrutar del cielo estrellado, a falta de 21 km ya se veía el laser de color verde que la organización monta en línea de meta en esta etapa reina,  y si cada etapa se hacía largo cuando veías la meta, ésta mucho más, esto te ayudaba a no perderte en la noche, al final 9h20´ en estos 82 km, al entrar en meta el correspondiente té que aquí si que se agradeció que estuviese calentito y a la jahima a ver como habían terminado los pies que ya venían algo tocados, comer algo y a descansar.
Día 7/04/2011, Día de descanso, la noche fue un ir y venir de gente continua, al igual que al día siguiente que todavía seguía entrando gente en meta, la organización daba 34 horas máximo para esta etapa, a partir del  control nº 4 montaba jahimas para la gente que quisiese poder dormir en ellas y descansar un rato antes de seguir, el cual era obligatorio llegar para no ser descalificado, este día era para comer bien el que pudiese porque el cuerpo ya no estaba para muchos trotes, te costaba comer las cosas que llevabas, el que las llevaba y no se había quedado corto en comida, o comerte lo de los días que quedaban, empezabas a acordarte de un buen plato o un buen bocadillo, a mi me salvaron los frutos secos y el jamón que me llevé porque es lo único que me entraba, las papillas de vegenat me las rechazaba el cuerpo que no veas, pero bueno había que comer y recuperar el cuerpo, no hay otra cosa, el día se hizo largo porque aun debajo de la jahima se notaba un calor agobiante, parecía una sauna y si salías fuera el sol te cocía, parecía mentira que en el día de ayer estuviésemos todo el día corriendo con esas temperaturas, pero el charrar con los compañeros de jahima y vecinos de cómo les había ido, lo hizo ameno, tocaba tener las piernas para arriba, estirar un poquito y a esperar la noche de nuevo, todavía en la tarde seguía entrando algún que otro corredor apurando las horas de cierre de control, y poco después avisaron de que entraba el último, donde toda le gente se acercaba a línea de meta a recibirlo en un espectacular aplauso, fue un japonés que el pobre iba destrozado, en los rostros de los corredores sin afeitar en los chicos, ya se apreciaba el cansancio y los kilos perdidos del esfuerzo, esta noche se armonizó con un concierto en pleno desierto de la opera de París, la cual algunos decidimos oír de fondo metidos en el saco, mi garganta no estaba para pasar frio y tocaban 42km más.
Día 8/04/2011, 5º etapa, ya mis pensamientos eran claros en este día, definitivamente no podía ir a más, conscientemente sabía que las sensaciones no eran como al principio, en las noches no podía descansar bien por la tos y la mucosidad, solo quedaba seguir peleando por aguantar los puestos en los que estaba, esta etapa fue para mí la más dura, nada más salir supe que iba a ser un día duro porque el cuerpo te lo dice, las piernas no iban y tenía unas sensaciones malísimas, el día de descanso no fue suficiente, pensé que sí pero parecía que la mochila no se vaciase de peso, los corredores con los que hasta ahora había compartido kms y formábamos grupo de carrera se me fueron para adelante como (  Ismael Dris Mohamed, 1º Español y 10º en la general y Marco Olmo 11º en la general )  excelentes corredores , rivales y sobre todo personas, me limité a mantener un buen ritmo sin dejar de correr para no perder mucho tiempo, este día al entrar en meta y parar, sabía que había sido el día más difícil para mí, empleando 3h57´en los 42 kms, en un terreno muy complicado y difícil.
Día 9/04/2011, 6º etapa y última, por delante 18 kms, mi hijo cumplía 10 meses y tengo que reconocer que tenia energía extra, la gente salió con muchas ganas y eso se notaba en el ritmo, todo el mundo pensaba en cruzar la última meta, la más importante, que te convertía en finiser de sables, esperaba Patrik con la medalla que iba a colgar a cada corredor uno a uno que la cruzase, estaba montada en un poblado llamado Tazzarine, que se cruzaba entero y la meta estaba al final, el ritmo parecía como si se tratase de una carrera de un solo día, ibas con corredores que en las etapas anteriores no coincidías, yo me centré en vigilar a los dorsales que podían hacerme perder algún puesto en la general, teniendo a un corredor marroquí a 13´y otro corredor japonés a 17`, a priori no era una distancia suficiente como para recortar ese tiempo pero eso no me hacía relajarme y tener que sufrir hasta el final para mantener ese 16º puesto en la general que, una vez pasado y pensando tranquilamente, es para estar muy pero que muy contento y satisfecho, la entrada en meta fue espectacular, con un tiempo de 1h28´, pensábamos que en esta etapa igual no tendría tanta arena según el Road-Book, pero nos equivocamos, tuvimos arena hasta el final, eso si un ambiente increíble, todo el mundo aplaudiendo, todos los medios de comunicación, y dentro de cada corredor unos sentimientos increíbles a sentir que lo has conseguido, dejas salir toda la tensión y das gracias sin parar a todo el mundo que tienes alrededor, es para vivirlo.
Con forme entrabamos a meta, te daban un picnic y un nº que correspondía a un autobús, el cual nos iba a llevar al hotel en Guaguazate, a 4h de autobús, donde nos esperaba una buena ducha y un bufet libre para recuperar el peso perdido. El día siguiente era de disfrute en el hotel, todo el mundo comentando la hazaña, valorando la experiencia, saboreándola, se realizó la entrega de trofeos, en un escenario muy bonito en la piscina de uno de los hoteles, y de conocer la ciudad aunque la mayoría no estábamos para andar demasiado, pero la ciudad lo requería, una vueltecita por el mercadillo y disfrutar de la gastronomía marroquí.
Día 11/04/2011, regreso, vuelo hacia Madrid y despedida, con mucha melancolía y algunas lagrimillas por el buen ambiente español que se ha vivido en esta edición, pero con muchas ganas también por ver a los tuyos, que me dieron la sorpresa de recibirme en el aeropuerto de Alicante con una pancarta enorme que ponía enhorabuena campeón, solo por esto ya vale la pena todo el trabajo y esfuerzo empleado en esta carrera, muchas gracias una vez más a todos, un fuerte abrazo de corazón.

Vicente Juan Garcia Beneito



3 comentarios:

JORGE ALEMAN dijo...

Excelente artículo de la dura MDS, pero más importante es el protagonista de esta inhumana historia, que tan solo unos pocos son capaces de poder terminar y aún más estar entre los mejores del Mundo. Ante esto, hay que quitarse el sombrero y decir "ENHORABUENA CAMPEON".
Un fuerte abrazo a ti y a tu familia, de un compañero y admirador.

VICENTE JUAN dijo...

JORGE MUCHAS GRACIAS POR TUS PALABRAS,UN ABRAZO

Anónimo dijo...

Aprovecho esta página para rendir toda mi admiración a tu mujer Mariana, por su participación en la última Stair Race de Nueva York (Juegos Mundiales de Policías y Bomberos 2011).
Ahora entiendo, como a través del deporte, se vencen todas y cada una de las adversidades que te ponen a prueba. Siempre recordaré el momento en que subió al podium para recoger la medalla que le proclamaría CAMPEONA DE LA VIDA. Un fuerte abrazo para ti, Vicente y gracias por hacernos equipo ganador en la prueba OPEN.
Teneis un gran amigo que os saluda desde Zaragoza (DAVID)